En ese momento, fue el desastre más mortal del mundo que involucraba a un vuelo comercial programado.
La aeronave empleada en el vuelo 253 era un Lockheed Super Constellation llamado Rafael Urdaneta, en homenaje a este prócer de la independencia venezolana, que tenía la matrícula YV-C-AMS.
Horas después el Robert Craig envió equipos en sus botes salvavidas, que recuperaron fragmentos de cuerpos junto con varios restos.
Hancock informó que tan pronto el capitán Plata comenzó a descargar combustible, vio las chispas y llamas cerca del motor 3 (en la parte interna del ala derecha), justo frente al averiado motor 2.
La junta lo consideró la causa más probable, pero afirmó que era incapaz de determinar esto con certeza.