Por lo general, monta a lo largo de su río en un tronco medio hundido, haciendo fuertes salpicaduras.
Se dice que los ahogamientos locales son obra de los vodyanoy (o rusalkas).
[1] En el folklore checo, esloveno y eslovaco las características del vodník son marcadamente diferentes a la concepción eslavo-oriental; Tiene una constitución y hábitos completamente humanos, salvo unas pocas diferencias.
De lo contrario, los vodníci pasan su tiempo corriendo su territorio o jugando a las cartas, fumando pipas o simplemente sentados en la superficie del agua (sobre rocas, sauces cercanos) y vagando.
En checo, eslovaco y esloveno cuentos vodníci viven en estanques o ríos; no tienen una vivienda en particular.