Virgilio Fernández era huérfano y residía en El Cafetal con sus dos hermanos en la casa familiar.
Virgilio Fernández era militante de Acción Democrática.
Trabajo en el El Nacional y después se fue al diario El Universal como redactor en la sección de política.
Desde la ventana del edificio administrativo de La Carlota un soldado les disparó con una ametralladora, diciéndoles que se fueran.
[3] Virgilio Fernández fue llevado a una clínica, donde falleció poco después.