Virgen de la Encina (Macotera)

Los forasteros se pasaban dos y tres días en el pueblo, participando en los actos religiosos.

Asistía tal multitud a sus cultos y novena, que el Visitador ordenó: En un principio, la gente foránea se quedaba a dormir en la propia ermita; entonces, el Obispo decretó la construcción de una casa adosada a la ermita, para que les sirviera de refugio: Dijo también: Dicha casa se edificó y la obra importó 4.400 maravedíes; pero, pasados unos días, se arruinó.

Los albañiles se declararon insolventes y el mayordomo tuvo que correr con todos los gastos.

El 8 de septiembre se celebra al mediodía una Misa Solemne a la que acuden autoridades y la corporación municipal.

Al día siguiente, después de la misa en honor a San Roque, sale a la plaza mayor acompañada de la imagen del patrón para escuchar la loa que se pronuncia desde el balcón del ayuntamiento.

Además, la Virgen de la Encina tiene un papel relevante durante la Semana Santa macoterana.

Por último, el Domingo de Resurrección, acude a la procesión del Encuentro con Jesús Resucitado durante la cual se retira el velo negro que simboliza el luto y se deja ver su vestido blanco.

Virgen de la Encina en su ermita.
Virgen de la Encina vestida de luto en Semana Santa.
Rezo de la salve a la Virgen de la Encina ante su ermita.
Calvario que hay en la ermita de la Virgen