Tuvo menos suerte en el banquillo del Campobasso, donde fue cesado en la quinta fecha por divergencias con el presidente y los malos resultados.
En la temporada de Serie C1 1984/85 obtuvo buenos resultados como entrenador del Cosenza, sin embargo el año siguiente fue cesado otra vez.
En 1988 volvió al Casertana por un año, para luego entrenar a Empoli, Baracca Lugo y Pisa.
En 1997 el presidente Corrado Ferlaino le confió el banquillo del primer equipo, después de cesar a Luigi Simoni.
En 2008 fue nombrado director deportivo del Real Marcianise, club campano que en ese entonces militaba en la tercera división italiana.