"Villanueva consiguió tener amigos fieles entre los indios y con su afán colonizador les ofreció construirles ranchos, entregarles bueyes, arados y enseñarles a cultivar la tierra obteniendo mediante ellos los alimentos que necesitaban."
Este príncipe, pasó por Buenos Aires como parte de un viaje que venía realizando en el Buque "Bacchante".
Y desde allí realizó un viaje a la estancia "Negrete" cuyo dueño en aquel entonces era el Sr. David Shennan.
Lo mismo ocurrió al regreso donde el tren llevó al huésped y su comitiva directo desde Villanueva hasta el actual barrio de Belgrano, lo cual en aquel entonces era posible utilizando la conexión que el FC Sud tenía con el FC Buenos Aires a la Ensenada para llegar hasta la Estación Central de Buenos Aires y allí conectar con las vías del FC del Norte para proseguir rumbo a la zona norte de Buenos Aires sin necesidad de hacer trasbordos pues la trocha era idéntica en los 3 ferrocarriles (trocha ancha).
Considerando que las crónicas no las escribían en el mismo momento, sino tal vez varios días o meses después en el barco mientras navegaban es muy probable que el relator haya olvidado este detalle del viaje en tren y lo narró como un viaje directo desde Buenos Aires hasta Villanueva.
Viajan en tren a la residencia del Ministro ubicada en Belgrano, al norte de la Capital Argentina.
Una mañana tormentosa y con mucho viento impiden realizar actividades entre las cuales estaba prevista un partido de cricket.
La formación compuesta por locomotora y dos coches especiales de lujo parte a las 3 P. m. desde la Estación Central (ubicada en la esquina que hoy sería Av.
Finalmente, para las 8:30 PM ya estaban en la Casa Principal donde tomaron su cena y luego fueron a descansar.
Tuvieron la oportunidad de contemplar la fauna nativa y comenzar a distinguir sus distintas especies.
Pasó así por la estancia "Negrete" en Villanueva, aquel príncipe, que casi 30 años después se convirtió en Rey de Inglaterra y fue conocido como Jorge V.
Recibida la comitiva, en la estación por Don Enrique Vivot se trasladaron a la estancia en sendos carruajes tirados por excelentes y briosos caballos.
En la estancia fueron obsequiados con un banquete en el cual dio la bienvenida en nombre de su señora madre el Sr. Alfredo N. Vivot, agradeció Mr.
También en esos cámpines hay algunos alojamientos que alquilan habitaciones, como El Refugio del Pescador.
Villanueva tuvo una historia turística y pareciera tener la idea de remontar, o por lo menos eso afirmaban los carteles electorales.
Cómo entretenimiento aquel que no va ni a pescar ni a descansar capaz se aburra un poco, el pueblo es chico y se recorre en una o dos horas; cuenta con casas muy viejas y es un manjar para aquellos coleccionistas de imágenes antiguas.