Victor Fontan

Tuvo una larga carrera deportiva, primero destacando a nivel regional y más tarde al Tour de Francia.

Al acabar la contienda, se convirtió en el mejor ciclista del suroeste de Francia, acumulando victorias, pero se mostró poco propenso a ir a correr lejos de casa suya: su participación en el Tour de Francia de 1924, en cuanto que corredor aislado, fue fugaz.

Hubo que esperar al 1926 porque Fontan demostrara su clase internacional: ganó la Vuelta en Cataluña.

El año siguiente volvió a ganarla (1927) y añadió la Vuelta en Euskadi ante los mejores ciclistas del momento: André Leducq y Nicolas Frantz.

El 1928, a los 36 años, participó en el Tour de Francia acabando en 7a posición y ganando dos etapas.