Milton Latham fue el que menos permaneció en el cargo, renunciando tan solo cinco días después de haber sido envestido.
[2] Para ello se hará una ceremonia en la que, para asumir el cargo, deberá tomar protesta con el siguiente juramento:
Pero en la práctica existe un acuerdo entre caballeros en el que este se limita a realizar acciones menores o sin importancia.
Siete vicegobernadores han accedido al cargo por dicha condición: cinco por dimisión y dos por muerte.
[3] Solo dos gobernadores han fallecido durante su encargo: Washington Bartlett (en 1887)[5] y James Rolph (en 1934),[6] ambos por causas naturales.
A lo largo de la historia, cinco gobernadores han renunciado: Peter Burnett (en 1851), Milton Latham (en 1860), Newton Booth (en 1875), Hiram Johnson (en 1917) y Earl Warren (en 1953).
No obstante, al igual que el vicepresidente de los Estados Unidos, en la práctica sus funciones legislativas son limitadas, pues no tiene derecho a voto excepto para resolver empates (en las que haya veinte votos a favor y en contra) y tampoco preside el Senado, cargo que le corresponde al presidente pro tempore del Senado, el cual por costumbre proviene del partido de la mayoría de la cámara y es confirmado por el pleno.
Aquella situación no trae mayor problema, pero a lo largo de la historia han ocurrido controversias entre ambos cargos.
Curb intentó anular el retiro de la nominación por la vía judicial, denominado el caso «In re Governorship» (en español, Sobre la regobernación), al que la Corte Suprema de California llegó a la siguiente resolución: «El vicegobernador tiene autoridad para ejercer todos los poderes gubernativos de nombramiento mientras que el gobernador está físicamente ausente del estado y el gobernador tiene autoridad para retirar la nominación hasta que la confirmación del nombramiento no sea haga efectiva».