La vibración suele generarse mediante un motor eléctrico al que se le coloca una masa descentrada con respecto a su eje de rotación.
Cuando los teléfonos inteligentes y los buscapersonas vibran, el zumbido de alerta se genera mediante un pequeño componente que está integrado en su interior.
Los vibradores de masa rotatoria excéntrica (ERM) funcionan haciendo girar un peso deliberadamente descentrado.
Las cribas vibratorias se utilizan para separar materiales mezclados a granel en partículas de diferentes tamaño.
Los vibradores para el hormigón consolidan el material recién vertido, de modo que se libere el aire atrapado y el exceso de agua, garantizando que se asiente firmemente y sin huecos en el interior del encofrado.
Las mesas vibratorias se utilizan a veces para probar productos con el fin de determinar o demostrar su capacidad para soportar vibraciones.
En estas tres aplicaciones, la pieza puesta a prueba normalmente se instrumentará con uno o más acelerómetros para medir la respuesta del componente al efecto de la vibración.