La venera es un dulce típico del occidente asturiano, cuyo origen está en disputa entre los concejos de Navia y Boal.
El conjunto se lleva al horno, previamente calentado, y se deja a unos 170 °C, pero calentando únicamente por la parte superior, hasta que las roscas comiencen a tomar color (en menos de media hora).
También se les puede añadir nata montada en los huecos y, sobre ella, las frutas.
Si bien este dulce claramente procede del occidente asturiano, actualmente hay una disputa abierta por su autoría entre los concejos de Navia y Boal, dos concejos cuyas capitales históricamente han rivalizado hasta mediados del siglo XX (cuando se produce una gran despoblación en Boal).
Aunque la base del producto y receta sea la misma, parece ser que la mayor diferencia radica en que cuando el dulce tiene origen en Boal, se utiliza exclusivamente almendra molida y ligeramente tostada, mientras que en la versión de Navia, es común el uso de nuez y avellana, aunque principalmente suelan ser de almendra molida (sin tostar).