Vasili Mitrojin
Su primera asignación al exterior tuvo lugar en 1952, durante el último año de vida del entonces líder supremo Iósif Stalin.Además se le dijo que nunca más volvería a realizar "trabajos de campo".Allí, el nuevo líder criticó duramente las políticas del fallecido mandatario, incluyendo entre ellas, las deportaciones masivas de pueblos.Al respecto de ello, Jrushchov llegó a irónicamente comentar a sus colegas del Congreso que «los ucranianos evitaron ese destino [el de la deportación] solo porque eran demasiados [nada menos que unos 40 millones para ese entonces] y no había dónde mandarlos».[1] Durante la era soviética, Vasili Mitrojin no intentó contactar con ningún servicio occidental de inteligencia.Finalmente, se presentó en la embajada británica, donde un oficial del MI6 vio el potencial de ese revelador material clasificado.Vasili Mitrojin y su familia serían luego ilegalmente «exfiltrados» a Gran Bretaña, aunque el por entonces nuevo gobierno de Borís Yeltsin no estaba creando obstáculos para que los miembros activos o jubilados de los servicios secretos rusos pudiesen libremente viajar al extranjero.