Una valla o cerca[1] es un elemento arquitectónico que se utiliza para delimitar áreas y protegerlas contra intrusos.
Las vallas se instalan en granjas, o en otros espacios como, por ejemplo, los jardines de las viviendas.
También se encuentran vallas confeccionadas con materiales naturales como cañas o brezo.
[2] Las vallas móviles son estructuras metálicas que se colocan en la vía pública para delimitar espacios con motivo de eventos temporales, como espectáculos, desfiles o procesiones.
En los laterales, cuentan con un enganche que permite unir diferentes vallas formando una protección continua para utilizarla en amplias extensiones.