Su padre, el rey Cristián IV, tuvo contactos con el zar Miguel I de Rusia para arreglar un matrimonio entre Valdemar Cristián e Irina, la hija del zar.
En 1643, el joven viajó a Rusia para casarse con su prometida.
Por ello fue encarcelado y permaneció en prisión hasta 1645, una vez que el zar había fallecido.
Regresó entonces a Dinamarca, pero ahí sostuvo conflictos con su medio hermano mayor, Federico III, que se prolongaron una vez que éste heredó el trono.
Desde 1655 entró a servir en el ejército de Suecia bajo las órdenes del rey Carlos X Gustavo, y moriría en batalla en Polonia, a los 33 años de edad, durante la invasión sueca a ese país.