Vörðr
Un vörðr (del nórdico antiguo: cuidador o guardián[1]) es un espíritu guardián en la mitología nórdica, que se supone sigue desde el nacimiento hasta la muerte el alma (hugr) de cada persona.La palabra inglesa wraith, que significa espectro, es derivada de vörðr.[2] En algunos tiempos, el cuidador se puede revelar a sí mismo como una pequeña luz o como una figura de una persona.Un árbol muy viejo (generalmente un olmo o un fraxinus) creciendo en el terreno de la casa podía ser apodado árbol guardián, y se creía que protegía de la mala suerte.Romper una hoja o una ramilla del árbol guardián era considerada una seria ofensa.