A pesar de que escribe sobre una disciplina técnica y desarrolla argumentos complicados[4] incluso para un lector moderno,[5] Chaucer resulta ser claro, lineal y consigue explicar de forma directa los puntos en cuestión.
[6] En todo caso la obra, aun siendo el primer ensayo técnico en lengua inglesa, tiene escasa relevancia literaria.
La red y estos planos se insertarán en un contenedor circular vacío, el meter.
En los círculos más externos, como la figura, está presente la subdivisión de los signos zodiacales y meses del año y en el plato subyacente está presente la división en días, divisiones de 5 en 5:[10] Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Scorpio, Sagitario, Capricornio, Acuario, Piscis y enero, febrero, marzo, abril, mayo, junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre, diciembre.
Estas enseñanzas varían desde calcular la altitud de cuerpos celestes, hasta encontrar el día y la hora exacta en la que nos encontramos; Chaucer enseña a Lewis también, por ejemplo, a orientarse, encontrando los cuatro puntos cardinales, o los conceptos mágicos de la astrología (como la influencia de los cuerpos celestes).