[1][2] La realización del TFG tiene la finalidad de favorecer que el estudiante integre las enseñanzas recibidas durante los estudios y asegurar la adquisición de las competencias propias de la titulación.
[3][4][5][6] El trabajo se realiza bajo la supervisión de un tutor (supervisor del TFG) y al final se debe presentar y defender el trabajo ante un tribunal que calificará y valorará el trabajo.
[7][8][9][10][11] Este tipo de Trabajos son útiles para el desarrollo de competencias específicas (que están directamente relacionadas con la profesión) y competencias transversales.
Entre las competencias transversales que pueden desarrollarse están las de carácter ético o deontológico [12].
Pero, en general, cualquier TFG suele incluir los siguientes elementos:[13]