El proyecto o trabajo de fin de carrera (también llamado PFC) es, en ciertos países como los pertenecientes al Espacio Europeo de Educación Superior, un proyecto o trabajo exigido como condición para obtener finalmente una titulación universitaria.
En España, tras la reforma universitaria de Bolonia, este trabajo pasa a ser requisito obligatorio para obtener los correspondientes títulos oficiales de Grado y Máster.
Algunas universidades promueven que, en el caso de que estos proyectos sean software, se licencien de manera libre.
Con el Proceso de Bolonia y el Espacio Europeo de Educación Superior, los títulos universitarios de grado (240 créditos ECTS) exigen como condición para adquirir la titulación un proyecto de investigación autónomo con una tesina final que tiene entre 6 y 30 créditos ECTS.
[4][5][6][7] El trabajo tiene que incluir una tesina fruto de una investigación, que se hace bajo la supervisión de un tutor (supervisor del TFG) y al final se debe presentar y defender el trabajo ante un tribunal que calificará y valorará el trabajo.