Comenzó a ser elaborada por Eduardo Rubio a finales de los años 50 del siglo pasado en la antigua confitería "La Rosa de Oro".
En sus orígenes las plantillas de hojaldre con la que se elaboraban tenía forma circular pero dentada.
Sus principales ingredientes son: harina, huevos, aceite de girasol y azúcar.
La masa se hornea durante 45 minutos hasta obtener una textura esponjosa y dorada.
Posteriormente, las tortas se cortan en porciones individuales y se suelen espolvorear con azúcar glas o cubrir con almíbar.