El torneo se disputó en: Centro Deportivo Miécimo da Silva, Centro de Futebol Zico (CFZ), Estádio João Havelange, Estadio de Maracaná.
Sin embargo, la CONMEBOL, que representa a las naciones sudamericanas, sólo aceptó jugar con equipos Sub-17 (que clasificaron a través del Campeonato Sudamericano de Fútbol Sub-17 de 2007), ya que los equipos Sub-20 debían participar en el Mundial de Egipto.
Como las selecciones del área de Conmebol jugarían con la Sub-17, se les permitió incorporar hasta tres jugadores mayores de edad.
Finalmente, Perú declinó jugar porque su selección Sub-17 prefería jugar amistosos en Asia de preparación para el Mundial Sub-17 a disputarse en Corea del Sur, por lo que Bolivia ocupó su lugar.
En la final, Ecuador venció a Jamaica para ganar su primera medalla de oro.