Los meteorólogos la definieron como una «tormenta de nieve potencialmente histórica» e indicaron que la tormenta podría producir más de 60 cm de nieve a través de una amplia franja de la región del Atlántico Medio y podría «paralizar el tercio oriental de la nación».
Más de 10 000 vuelos fueron cancelados en relación con la tormenta, con efectos internacionales.
La tormenta tiene varios nombres no oficiales, incluyendo tormenta de invierno Jonas y Snowzilla.
El hielo y las carreteras cubiertas de nieve provocaron cientos de accidentes en toda la región afectada, varios de los cuales resultaron en muertes y heridos.
Al menos 31 personas murieron en incidentes relacionados con la tormenta: 5 en Nueva York, 5 en Carolina del Norte, 5 en Virginia, 3 en Maryland, 3 en Carolina del Sur, 3 en Washington D. C., 2 en Nueva Jersey, 2 en Pensilvania, 1 en Arkansas, 1 en Kentucky, y 1 en Ohio.