En un principio se le asigna como compañero de celda al demente nigeriano Simon Adebisi, conocido por su brutalidad y temido por varios reclusos blancos (Adebisi es un racista hacia la gente de color blanca, aunque hace una excepción con Ryan O'Reily).
Frente a todos, Beecher es enviado al Hoyo, mientras Schillinger se recupera y recibe una venda en el ojo, prometiendo una venganza.
Durante los disturbios provocados por Kareem Said, Beecher le deja claro que hará cualquier cosa para arruinarle la libertad condicional y así quedarse en prisión de por vida, en venganza por haberlo violado y humillado de varias formas.
Acto seguido, Beecher le arranca la mitad del pene de un mordisco y es enviado al Hoyo, aunque finalmente termina saliendo.
Una vez reabierta Em city, Schillinger trata de ser el preso modelo para así obtener la condicional.
No solo pierde la oportunidad para la libertad condicional, sino que le agregan 10 años más a su sentencia.
Más tarde, entra un nuevo personaje a la serie llamado Chris Keller, interpretado por Cristopher Meloni.
Este último se da cuenta e intenta intimidar a Beecher en un pasillo oscuro, pero este, quien tenía las uñas largas y filosas, le corta la cara y le raja la garganta, matándolo instantáneamente.
Es enviado al hoyo por unos días, hasta que sale del lugar, mientras Keller intentaba sin éxito reconciliarse con Beecher.
Este último es alertado por Robson y Schillinger, creyendo que Beecher lo quiere perjudicar nuevamente.
Beecher y Brown rápidamente intiman en la cama, lo que provoca los celos de Keller.
Al final este se da cuenta de la manipulación de Schillinger e intenta matar a Eli Zabitz, pero este último se asusta demasiado y le da un paro cardíaco, muriendo frente a Keller y Robson.
Durante los primeros días del año, un equipo de prensa llega a Oz para documentar la vida en prisión.
Beecher es entrevistado por Lisa Logan acerca de su experiencia con Keller y Schillinger, no dando mayores detalles.
Luego llega Ronald Barlog, un homosexual condenado por robo de vehículos, a quien Beecher le echa un ojo y por supuesto hace que Keller se vuelva celoso.
Al mismo tiempo, Keller se atribuye la responsabilidad por el asesinato de Hank Schillinger y es enviado a un manicomio, todo con tal de proteger a su amado, el cual se lo agradece con un beso apasionado.
Al mismo tiempo esta lo ayuda en su intento de tener la libertad condicional, a quien se la niegan.
Este último consigue la condicional, le agradece de todo a la hermana Peter Marie y a Kareem Said (sin saber que más tarde Said sería asesinado por un judío llamado Lemuel Idzik) y se reúne con su familia.