Normalmente va sentado o de pie en la popa del barco mirando hacia la proa, en sentido contrario a los remeros, que van de espaldas al movimiento.
También es importante que tenga experiencia en enfrentarse a situaciones muy variadas, y debe conocer bien a los integrantes de la tripulación que gobierna, cuales son sus puntos débiles, sus cualidades y cómo es la mejor forma de hacer que rinda el máximo de su capacidad.
Por todo esto es importante que el entrenador hable con él y compartan los diferentes puntos de vista en los entrenamientos, antes y después de las regatas.
Los timoneles suelen ser personas de poco peso, y no demasiada estatura, ya que todo el peso que aporte es perjudicial para la velocidad del bote.
Aproximadamente los timoneles habitualmente vistos en las competiciones rondan los 55kg para los hombres y 50kg para las mujeres.