En 1963 sucedió a Lord Brookeborough en el puesto de primer ministro.
La oposición a estas medidas entre los protestantes era tan grande que, en 1967, un miembro del parlamento que apoyaba a O´Neill fue pateado hasta quedar inconsciente por miembros de la Orden de Orange [1].
A pesar de ello, la NICRA pospuso sus manifestaciones.
Las reformas limitadas no acabaron de satisfacer a la comunidad católica y provocaron un gran malestar entre los lealistas.
El electorado votó sobre la base de la dicotomía Pro-O'Neill y Anti-O'Neill, y él mismo sufrió una derrota humillante ante Ian Paisley en su propio distrito electoral.