[1] En ciertas tradiciones espirituales dhármicas como el hinduismo, el tercer ojo guardaría una correlación con el ajna, o el chakra ubicado en el entrecejo.
Las personas que aducen poseer la capacidad de utilizar sus terceros ojos se les denomina normalmente videntes o adivinos.
Según esta teoría, los seres humanos poseían en tiempos antiguos un tercer ojo real en la parte posterior de la cabeza con funcionalidad física y espiritual.
[1] En el Taoísmo y en muchas religiones tradicionales Chinas como el Chan (emparentada con las escuelas Zen), la "práctica del tercer ojo" consiste en centrar la atención en el punto entre las cejas con los ojos cerrados, mientras el cuerpo se halla en varias posturas de qigong.
La observación mística se basa en el primero de los dos ojos, y no obstante, podría ir más allá".
Leadbeater asegura que mediante la extensión de un "tubo etérico" desde el tercer ojo, es posible desarrollar visión telescópica y microscópica.