Teología dialéctica

[3]​ Si bien dialéctica es un concepto de raíces filosóficas que se hunden hasta la filosofía antigua y que ha encontrado con Hegel en tiempos modernos una nueva formulación, el epíteto 'dialéctico' de la teología dialéctica obedece a su nueva postulación por Karl Barth:[2]​ Con esto, Barth se vuelve críticamente contra el protestantismo cultural, que se ocupaba de preguntas relativas a la cultura, la moralidad, y a todos aquellos aspectos en que el cristianismo ha fungido como contribuyente de la cultura.

Lo 'escatológico' y 'último' no hace referencia acá a la escatología tradicional, concebida como una doctrina de las últimas cosas venideras temporalmente, sino que se trata más de un predicado cualitativo que atañe a la forma de enfrentar la vida en el momento presente.

Pero, ¿cómo es posible siquiera hablar de aquello que se define como lo totalmente otro (ganz Andere)?

Es factible hacerlo solamente mediante la revelación de Dios (Offenbarung Gottes).

El camino dogmático es el de la ortodoxia aferrada al supranaturalismo y a ideas francamente premodernas.

El camino de la crítica pertenece a la mística, entendida como interioridad subjetivista.

De hecho, la relación contrapuesta entre la negación y la afirmación constituye una paralelismo formal con la doctrina luterana del hombre como siendo, al mismo tiempo, 'justificado' y 'pecador' (simul iustus et peccator).