[2] Temis tenía varios templos en Grecia, aunque los autores antiguos no los describen con gran detalle.
[6] Entre estos titanes del mito primordial, pocos fueron venerados en santuarios específicos en la época clásica, y Temis era tan antigua que los seguidores de Zeus afirmaban que fue con él con quien tuvo a las tres Moiras.
[11] Cuando se le hace caso omiso, Némesis trae el justo y colérico castigo.
[13] El nombre de Temis podría haber sido sustituido por Adrastea («ineludible») al nacer Zeus en Creta.
[15] Temis siguió aconsejando con sus profecías, así alertó a los otros dioses de la inminente guerra que se cernía sobre Tebas.
Esquilo imagina a Prometeo como hijo de Temis, pero añade que esta también pudiera ser Gea.
[24] Graves por algún motivo la empareja con Eurimedonte, y dice que ambos rigen el planeta de la ley, Júpiter.
Se la representa sobre un león para señalar que la justicia debe estar acompañada de la fuerza.