El «teléfono rojo» es una línea directa de comunicación entre la Unión Soviética y los Estados Unidos.
Pero, a pesar de los conflictos diplomáticos y las guerras indirectas que se llevaron a cabo entre ambos estados, Washington y Moscú contaban con una vía de comunicación directa,[1] lo que popularmente se conoce como el «Teléfono Rojo».
Con esta idea, se tendió una línea dúplex de comunicación por cable que realizaría la ruta Washington D. C. – Londres – Copenhague – Estocolmo – Helsinki – Moscú y estaría secundada por un enlace de radio Washington D. C. – Tánger – Moscú, donde, lógicamente, se enviarían comunicaciones cifradas.
Las actualizaciones de esta línea no tardaron en llegar y el cable transatlántico submarino se convirtió en secundario.
[4] En mayo de 1983, se propuso una comunicación vía fax, que no entró en vigor hasta dos años más tarde.