Tejado en diente de sierra

Habitualmente se disponían en series de tres en tres, y se han utilizado históricamente como fuente de iluminación principal en edificios industriales y fábricas.

[1]​ A veces se le atribuyen al ingeniero y arquitecto británico William Fairbairn los primeros diseños de lo que denominó el principio del cobertizo (shed principle) posiblemente ya en 1827.

El primer ejemplo documentado se puede encontrar en la Nave Textil del manufacturero Titus Salt en la colonia industrial de Saltaire Mills, cerca de Bradford, construida en 1851.

[3]​ Hubo una disminución en su uso cuando la iluminación artificial se hizo prevalente, pero el diseño resurgió en el último cuarto del siglo XX y principios del siglo XXI, ya que los arquitectos y diseñadores dieron mayor importancia y valor a la introducción de luz natural en los edificios para mejorar su eficiencia ambiental.

[5]​ Los techos en diente de sierra, en los que elementos modulares opacos se combinan con superficies transparentes, inclinadas o de varias formas, han vuelto a prevalecer.

Fábrica construida para Morris Engines Ltd., en Gosford Street, Coventry en 1923, donde se aprecian sus naves con tejados en diente de sierra
Iluminación natural en el interior de una nave techada con un tejado en diente de sierra
Diseño de la fábrica textil Elbers, Alemania