Teatro Amadeo Roldán

Permaneció destruido y clausurado durante varios años, hasta que fue reconstruido y reinaugurado en 1999, como la sede de la Orquesta Sinfónica Nacional de Cuba.

La Orquesta toca cada domingo a las 23.

Ubicado en un monumental edificio moderno, que alguna vez albergó al Auditorium de La Habana, actualmente consiste de dos salas: la Amadeo Roldán y la García Caturla, en donde se ofrecen conciertos de orquestas sinfónicas, recitales de piano, y una mezcla de música clásica y contemporánea.

El Amadeo Roldán posee 886 asientos, para conciertos importantes como los de Egberto Gismonti y Leo Brouwer.

La Sala Caturla es para bandas pequeñas y posee la capacidad para 276 espectadores.