La tasa de crecimiento demográfico, en demografía y ecología, es la tasa o índice que expresa el crecimiento o la disminución de la población.
Un ratio o tasa de crecimiento positiva indica que la población crece, mientras que una tasa de crecimiento demográfico negativa, (descenso demográfico) indica que se produce una descenso de la población.
Una tasa nula de crecimiento demográfico o población constante indica que no hubo cambios en el número de personas en los dos tiempos, es decir no hubo diferencia neta entre los nacimientos más inmigración y muertes más emigración, aun cuando se hayan producido cambios en alguna variable que se han compensado con otras y se consigue una población en equilibrio.
[2] La tasa de crecimiento demográfico puede expresarse bajo la siguiente fórmula:[3] La forma más común de expresar el crecimiento de la población es como porcentaje de crecimiento respecto al total del periodo tomado como inicial.
La teoría de la transición demográfica puso de relieve los profundos cambios que se estaban produciendo en la población mundial desde el siglo XVIII hasta el final del régimen demográfico moderno caracterizado por una muy baja tasa de mortalidad y natalidad.