A la aceleración del pensamiento que es el trastorno cuantitativo de su velocidad y que puede manifestarse con o sin verborrea, se agrega en la taquipsiquia una aceleración más generalizada de la actividad psíquica en su conjunto.
En su grado máximo y extremo llega a la fuga de ideas.
Este último cuadro es menos frecuente que el trastorno bipolar, en el que se alternan períodos depresivos y maníacos, pudiendo haber predominio de una u otra fase.
En las fases maníacas del trastorno bipolar también puede observarse taquipsiquia y fuga de ideas.
De igual modo, la taquipsiquia aparece en variados cuadros clínicos con componente maníaca, como en el síndrome mixto o manía disfórica.