De este período en adelante muchos tangkas nepalíes fueron exportados al Tíbet.
Estos siguieron la estructura y el tipo nepalí con diferencias menores para afirmar sus orígenes locales.
Los tangkas sino-tibetanos, acuñados en 1793 tienen una leyenda en chino que dice: "Qian Long Bao Tsang" (dinero tibetano del período Qian Long) de un lado y su transcripción al tibetano del otro.
Los tangkas para la circulación general sólo se acuñaron en el año 58.º de Qian Long.
El diseño de estos tangkas permaneció casi intacto por varias décadas.
La mayoría de estas monedas poseen la misma fecha, 13-46 (1792) independientemente del año en el que realmente fueron acuñadas (los numismáticos refieren a esto como "frozen dates", o "fechas congeladas" por su traducción al español).
En total, hay al menos 37 variedades menores conocidas, pero posiblemente 50 o más podrían distinguirse.
La leyenda está escrita de tal manera para caber en los ocho círculos.
Este tangka especial, acuñado en mejor plata que el Gaden tangka normal, fue distribuido a monjes durante el Festival Monlam (Festival de la "Gran Oración" por su traducción al castellano) en 1910.
La moneda puede haber tomado su nombre de este palacio que fue construido por el 7.º Dalái Lama Kelzang Gyatso.
En 1881, un edicto fue emitido ordenando que no se discrimine entre el tangka falso y el genuino, por ello, las monedas extraoficialmente acuñadas se convirtieron en monedas de curso legal.