Steven Pippin

[5]​ Los primeros trabajos de Pippin se basaron en convertir muebles y objetos cotidianos en cámaras estenopeicas que luego utilizaba para tomar fotografías comprensivas.[6]​ Su trabajo implica a menudo una importante cantidad de planificación para superar los problemas prácticos que plantea el objeto elegido.En esta obra, Steven Pippin busca reflejar ese cambio mediante un método que consiste en realizar de manera simultánea la misma fotografía con una cámara digital y una analógica.[8]​[10]​ Nuestro universo se encuentra teóricamente, según las teorías astrofísicas, en un estado constante de equilibrio entre el colapso mediante implosión y la explosión total.Durante 10 años aproximadamente Steven Pippin se dedicó a ingeniar una escultura que pudiese representar esta metáfora.Así pues, el lápiz se mantiene erguido sin ayuda de nada más que su punta.[5]​[11]​ Esta obra parece parar el tiempo a la vez que mantiene al espectador en un estado constante de expectación y nos enseña la fragilidad del equilibrio.Gracias a esto no solo consiguió demostrar que efectivamente la hipótesis era cierta, sino que además asentó las bases del cine, la fotografía en movimiento y por si fuera poco, ayudo al mundo en general a comprender mejor el movimiento del caballo.