Orbuch se escondió en los bosques de Polonia con su familia durante la Segunda Guerra Mundial.
Pasó el resto de su vida dando conferencias y charlas al público estadounidense, hablando de sus experiencias en la guerra y, en 2009, publicó su autobiografía titulada, Here, There Are No Sarahs: A Woman's Courageous Fight Against the Nazis and Her Agridulce Fulfillment of the American Dream (Aquí no hay Sarahs: la valiente lucha de una mujer contra los nazis y su agridulce cumplimiento del sueño americano).
Dos años más tarde, después de que los alemanes iniciaran la Operación Barbarroja (la invasión alemana de la Unión Soviética) los nazis ocuparon Liúboml y obligaron a todos los judíos a vivir en un gueto.
Ocho mil judíos se vieron afectados, las políticas racistas y genocidas de los nazis obligaron a los judíos a una difícil elección: luchar, escapar o esconderse.
Siempre llevaba dos granadas, una para los nazis y otra para ella ya que no quería ser atrapada con vida.
[2] Durante el resto de su vida se dedicó a contar sus experiencias en conferencias y charlas públicas[4] y en 2009 publicó su autobiografía, titulada Here, There Are No Sarahs: A Woman's Courageous Fight Against the Nazis and Her Bittersweet Fulfillment of the American Dream, en coautoría con el historiador estadounidense Fred Rosenbaum.