El soneto con eco es una sofisticada variante del soneto que fue utilizada durante el barroco, por autores como Lope de Vega y Paola Rodríguez, entre otros.
Se caracteriza porque la última palabra de cada verso es la repetición (eco) del final de la palabra inmediatamente anterior: SONETO DIFÍCIL (Francisco de Quevedo) Es el amor, según abrasa, brasa; es nieve a veces puro hielo, hielo; es a quien yo pedir consuelo suelo, y saco poco de su escasa casa.
Es un ardor que a quien traspasa, pasa; y como a veces yo paselo, selo; es un pleito do no hay apelo, pelo; es del demonio que le amasa, masa.
Tirano a quien el Cielo inspira ira; un ardor que si no se mata, mata; gozo, primero que cumplido, ido; flechero que al que se retira, tira; cadena fuerte que aun de plata, ata; y mal que a muchos ha tejido nido.