[1][2] [3] Esta especie, conjuntamente con otras 20 especies silvestres de papa morfológicamente muy similares entre sí y denominadas en su conjunto complejo Solanum brevicaule, ampliamente distribuidos desde el Perú central hasta el norte de la Argentina es el stock a partir del cual se domesticó a Solanum tuberosum, la papa cultivada.
[4] Los siguientes taxones se incluyen dentro del complejo Solanum brevicaule (todos son diploides salvo indicación de otro nivel de plodía entre paréntesis): S. achacachense, S. ambosinum, S. avilesii, S. brevicaule, S. bukasovii, S. canasense, S. gourlayi subsp.
Según versiones de los habitantes más antiguos del lugar, antes de que se conozcan otras especies tales como la cebada, las aves en general, tenían como principal alimento a estas papas silvestres.
[5] Solanum brevicaule fue descrita por Friedrich August Georg Bitter y publicado en Repertorium Specierum Novarum Regni Vegetabilis 11: 390.
[6] Solanum: nombre genérico que deriva del vocablo Latino equivalente al Griego στρνχνος (strychnos) para designar el Solanum nigrum (la "Hierba mora") —y probablemente otras especies del género, incluida la berenjena[7]— , ya empleado por Plinio el Viejo en su Historia naturalis (21, 177 y 27, 132) y, antes, por Aulus Cornelius Celsus en De Re Medica (II, 33).