En el lugar además funciona como un parque rupestre que recibe visitantes.
Se descubrió que los dos ecosistemas terrestres de esta zona, los arbustos de hoja dura del Mediterráneo interior Quillaja saponaria y Porlieria chilensis, y los arbustos espinosos del Mediterráneo interior Trevoa quinquinervia y Colliguaja odorifera, tienen un bajo nivel de protección a nivel nacional.En esta zona se han encontrado 41 especies de plantas vasculares, de las cuales 4 están clasificadas como categorías de protección nacional, de las cuales 2 están amenazadas la antes mencionada Jubaea chilensis) y Porlieria chilensis.
Las aves más registradas son la codorniz, el picaflor chico, Tenca, Diuca y la Turca, mientras que la abundancia de las otras especies es menor.
"La ecorregión mediterránea de Chile ha sido catalogada como hotspot por su valor y vulnerabilidad a nivel mundial ("Bosques Chilenos Templados Valdivianos y de Lluvia Invernal").
"[2] En cuanto al Parque Rupestre Monte Aranda, este posee una superficie de 25 Hectáreas y se encuentra inmerso en el área del santuario.