Sin intervalo

Luego, todos juntos, debieron ir redondeando el argumento, cuyo resultado final se vio enriquecido con el aporte creativo del grupo en su totalidad.

Del proyecto participaron un grupo de prestigiosos actores y técnicos, con los cuales trabajó durante los dos meses previos al rodaje.

La filmación principal tuvo lugar en tiempo real, en un solo decorado, una gran casa con distintos ambientes, construidos en un Estudio y donde dos cámaras registraron todos los detalles de la reunión convocada por el personaje interpretado por María Vaner, Deborah Martín, una estrella de cine retirada, que decide un día, sin explicar el motivo, reunir a su familia, con la cual no mantiene una estrecha relación.

Del encuentro participan su madre (Hilda Bernard) una activa empresaria a pesar de su edad, que llega acompañada por su enfermero y guardaespaldas (José Luis Alfonzo), su fiel asistente (Silvia Baylé), su única hija mujer, también actriz, de gran popularidad en la actualidad (Verónica Elizalde), sus tres hijos varones, el mayor (Alejandro Awada) su administrador, el del medio (Boy Olmi) quien vive en el sur, donde tiene una hostería y el menor, e hijo de un segundo matrimonio, que es músico y está radicado en Estados Unidos (Luis Álvarez).

También están presentes las mujeres de sus dos hijos mayores (María Socas y Silvana Sosto).