Este estado dura siete días, durante los cuales los miembros de la familia tradicionalmente se reúnen en una casa y reciben visitas.
Es tradición que los vecinos suministren la primera comida, la cual se conoce como seudat havra'ah (עודת הבראה) y consiste en huevos y lentejas.
[3][4] Generalmente no se intercambian saludos y los visitantes esperan para que los dolientes inicien la conversación.
Habitualmente, los visitantes recitan las tradicionales palabras de compasión: HaMakom ienajem etjem beToj shear avelei tzion virushalaim, lo que se traduce como: Pueda el Omnipresente reconfortarte junto con los otros dolientes de Sion y Jerusalén.
Una vez iniciada la conversación por la persona doliente, es apropiado para los visitantes hablar sobre el/la fallecido/a, compartiendo historias de su vida.