Šarūnas Bartas

Tras matricularse en la escuela moscovita de cine VGIK, en 1985 volvió a esas regiones donde entró en contacto con el pueblo nómada tofalar, cuyas precarias condiciones de vida le impresionaron vivamente, y que retrataría en el documental Tofolaria (1985) y en la película de ficción Few of Us (Mūsų nedaug, 1996, presentada en la sección Un Certain Regard del Festival de Cannes).[9]​ Otras películas notables de Šarūnas Bartas son Peace to Us in Our Dreams (Ramybė mūsų sapnuose, 2015), donde él y su hija Ina Marija Bartaite son los protagonistas, abordando el tema del duelo por la muerte de Katya Golubeva -que falleció en circunstancias no aclaradas en 2011-[10]​ y Frost (2018), que representó a Lituania para el Oscar a la mejor película extranjera.[11]​ El cine de Šarūnas Bartas suele encuadrarse en lo que la crítica ha llamado slow cinema,[12]​ junto a directores clásicos como Andrei Tarkovsky o Theo Angelopoulos y contemporáneos como Lav Diaz, Tsai Ming Liang o Béla Tarr.[13]​ Se caracteriza por el minimalismo en los diálogos (o la ausencia de ellos, como en Koridorius o la mayor parte del metraje de Few of Us) y el estatismo de las tomas, que se detienen largamente en paisajes desérticos y esteparios,[14]​ así como en el rostro humano, cuya crudeza es análoga a la del entorno natural, en primeros planos y planos detalle que contrastan con el anonimato de las tomas panorámicas con los que retrata los espacios vacíos o los desplazamientos de la colectividad.[17]​ Respecto a su manera de concebir el cine, Bartas ha declarado en una entrevista concedida en 2016: