En 1997 China compró un A-50 a Rusia que Israel modificaría, mediante la instalación de un radar Phalcon AEW.
China respondió con la puesta en marcha de un programa para desarrollar un radar y la investigación se encargó al Nanjing Research Institute of Electronic Technology.
China diversificó su investigación, creando hasta cinco tipos diferentes de modelos.
Al ser una configuración inusual pero similar a la del Saab 340 AEW&C con sistema de radar Ericsson Erieye algunos especularon con espionaje industrial o cooperación encubierta.
El KJ-200 permitió a China contar con un avión de alerta temprana, mientras en paralelo se trabajaba en lo que acabó siendo el KJ-2000.