Seriñá

En su término municipal se hallan varias cuevas con yacimientos prehistóricos del Paleolítico Superior, entre ellas la de Reclau Viver.

Actualmente están protegidas por el Parc de les Coves prehistòriques de Serinyà[4]​ Según Pascual Madoz[5]​ contaba con 199 habitantes y 70 viviendas.

La iglesia parroquial estaba como ahora dedicada a San Andrés y estaba servida por un cura de ingreso de provisión real y ordinaria.

Su economía giraba en torno a las canteras e industria del yeso, el cultivo de cereales y algo de ganado lanar.

Su producción se evaluó en 3.745,600 reales e impuestos por contribuciones 93,640.