También se le conoce por haber dirigido la Comisión Kraigher, creada por el gobierno yugoslavo para asesorarle y proponer soluciones a la crisis económica que afectó al país en los años 1980.
[1][2] Tras la Segunda Guerra Mundial, su actividad política se centró en los asuntos de índole económica.
En 1951 se trasladó a Belgrado y fue gobernador del Banco Nacional Yugoslavo hasta 1953.
En 1967 abandonó este cargo para asumir la Presidencia de la Asamblea eslovena, que ocupó hasta 1974.
[2] Tras la muerte del destacado político esloveno Edvard Kardelj en febrero de 1979, Kraigher heredó sus funciones en el partido y en el Estado: el Parlamento esloveno le eligió miembro de la Presidencia federal del Estado, compuesta por ocho miembros, y el Comité Central de los Comunistas Eslovenos le envió como representante al Comité Central del partido federal.
Tras abandonar la presidencia del Estado, en 1986 Kraigher se retiró a la vida privada.