Francesco Bernardi, más conocido como Senesino, fue uno de los más afamados castrati de la historia.
Su tesitura de contralto y sus magníficas florituras provocaban la admiración del público.
Se dice que su voz podía ser clara y aguda aunque emocionaba con su bello claroscuro en las notas más graves.
Sus casi dos metros hacían a Senesino perfecto para los papeles de héroe.
Entre los castrati es muy conocido por estrenar el 20 de febrero de 1724 el famoso Giulio Cesare (Julio César) de Haendel junto a Francesca Cuzzoni.