Su mayor éxito internacional fue logrado en la Copa Africana de Naciones de 2013, cuando jugó la gran final frente a Nigeria.
Otro de sus logros más destacables, aunque a nivel juvenil, fue conseguido en la Copa Mundial de Fútbol Sub-17 de 2001 cuando alcanzaron el tercer lugar, venciendo en el último partido 2–0 a Argentina, tomándose la revancha un año después de haber sufrido una contundente derrota (7–0) ante dicha selección sudamericana en un partido amistoso.
A pesar de que sacó su primer partido contra Costa de Marfil y sólo necesitaba un empate ante Ghana para el progreso, Burkina Faso perdió 1:0 y no pudo clasificarse para la fase de eliminación directa del torneo.
Los Potros (Les Étalons en francés, como se le conoce a esta selección), se enfrentaron contra Nigeria en la Final de la Copa Africana de Naciones 2013, donde cayó por 1:0, logrando el subcampeonato, pero de todas maneras se consagró como una de las grandes sorpresas del torneo.
Ganó el partido de ida en su país por 3:2, pero luego perdió en Argelia por 0:1, quedando fuera del certamen por gol de visitante.