Complicando más su vida, Gordon tiene que cuidar tanto de James como del Agente 11 (a quien lo llama “Spot”) ya que, por un malentendido, Gordon le entrega al perro a James como obsequio.
Al principio, el perro no juega con James ni con Gordon debido a que cuando era cachorro, Murdoch le había enseñado a no divertirse; pero de pronto se encariña con James y también con Gordon.
En eso, Spot aparece en el lugar y nuevamente logra derribar a Talia, empujándolo por la ventana.
Terminado esto, Murdoch nuevamente quiere llevarse a Spot pero Gordon se lo impide, proponiendo que sea el perro quien decida con quien quedarse.
El perro se encuentra con James y Stephanie, a quien le quita su cartera.
Al devolverle la cartera, Stephanie le comenta a Gordon lo mucho que su hijo lo quiere, tanto a él como al perro por lo que, ella le pide si quiere ser su novio, Gordon acepta y se queda con ella, con James y con Spot.