Los carpelos son casi siempre separados y el fruto es un folículo múltiple con cada uno erectos a divergentes cuando maduros.Las especies más delicadas y pequeñas también se usan como planta de interior.[3] La especie Sedum rupestre se utiliza ocasionalmente en ensaladas o como condimento, tiene sabor agrio.[4] Sedum acre (el epíteto alude a su sabor áspero), en la medicina tradicional se utilizaba molida para tratar crisis de epilepsia, malaria y diarrea, y los tallos se machacaban aplicándolos en cataplasmas para las dolencias cutáneas.Es altamete tóxica por lo que solo se utiliza en forma de ungüento o pomada como cicatrizante.