Cursó sus estudios primarios en el colegio de los franciscanos.
Fue ordenado sacerdote en 1835, en el palacio episcopal de Ibiza.
Fue nombrado vicario de las parroquias de San Jaime y Santa Cruz en Palma (1835-1843), en cuyo servicio mostró una particular vocación por la predicación y la pastoral sanitaria y social.
Dedicó a este instituto el tiempo suficiente como para verlas expandidas en las islas de Mallorca e Ibiza y estableció la casa madre en Palma de Mallorca.
[5] En la Iglesia católica, es considerado venerable siervo de Dios.