Sidón fue capturado en diciembre de 1110 y otorgado a Eustaquio Grenier.
El señorío era una franja costera sobre el Mar Mediterráneo entre Tiro y Beirut.
Fue conquistado por Saladino en 1187 y permaneció en poder musulmán hasta 1197.
En el siglo XIII Julián Grenier lo vendió a los Caballeros Templarios, pero en 1260 fue destruido por los mongoles luego de la Batalla de Ain Jalut y sus ruinas fueron capturadas por los mamelucos.
Julián de Sidón lo vendió a los Caballeros Teutónicos en 1256.