Las toxinas que producen varían según la especie, pero todas tienen efectos significativos sobre la salud humana si se entra en contacto con las espinas.
[2] Tanto la cabeza como el cuerpo tiende a ser espinosos o estar recubiertos de placas óseas.
La familia Scorpaenidae (peces escorpión) tiene una distribución global en aguas cálidas, con una alta diversidad en el Indo-Pacífico.
Los platycephaloidei son principalmente habitantes de fondos marinos arenosos o fangosos, se distribuyen en aguas tropicales y templadas del Indo-Pacífico occidental.
Las reacciones comunes incluyen[4]: Síntomas inmediatos El veneno provoca un dolor intenso, a menudo descrito como ardor o palpitante.
En casos raros, pueden producirse síntomas más graves, especialmente si el veneno se inyecta profundamente o si la persona tiene una reacción alérgica.
En casos graves, como cuando ocurren reacciones sistémicas o complicaciones, puede ser necesario un tratamiento médico profesional, que incluya líquidos intravenosos, terapia de oxígeno y, si está disponible, antídotos.
[5] Al nadar en áreas donde se sabe que habitan peces venenosos, use calzado protector y tenga cuidado cerca de entornos rocosos o de coral donde estos peces puedan esconderse, evite el contacto.
Se clasifican en las siguientes familias agrupadas en siete subórdenes:[7][2] La introducción de especies invasoras, como el pez león (Pterois spp.)